Para acabar con los pavimentos resbaladizos te proponemos varias soluciones que son perfectas para aplicar tanto en tu propio hogar como en espacios públicos, como centros comerciales, hospitales o centros educativos. ¡Ya no tendrás que preocuparte de los suelos resbaladizos!
Abujardadora portátil, la más eficaz
Una de las herramientas más útiles para conseguir superficies antideslizantes es la abujardadora portátil. Con esta herramienta, que cuenta con una guía especial regulable en altura y profundidad, se pueden trabajar tiras antideslizantes de 3 y 9 cm de grosor. Es perfecta para realizar trabajos verticales u horizontales, tanto si se realiza el abujardado en el taller o en el lugar donde el pavimento ya está colocado. La abujardadora portátil se puede utilizar tanto en pavimentos de piedra como de mármol, granito u hormigón.
Arenadora, personaliza las franjas antideslizantes
El arenado es otra de las soluciones para conseguir pavimentos rugosos y antideslizantes. A diferencia de la abujardadora portátil, la arenadora es un poco más complicada de utilizar en pavimentos o escaleras que ya están colocados. No obstante, con ella se trabaja de forma muy rápida y sin generar polvo. La arenadora es ideal si se quiere personalizar la franja antideslizante ya que se pueden realizar plantillas con los rollos de vinilo adhesivo. Una vez elegida la cenefa o el dibujo, se rebaja la franja con la arenadora y se consigue el dibujo.
Perfil de aluminio, económico y sencillo
El sistema del perfil de aluminio es muy práctico y, sobretodo, económico. Las piezas de pavimento vienen preparadas con una pequeña ranura del grosor de un disco. Una vez se colocan, se introduce el perfil de aluminio en la ranura y se colocan unas gotas de silicona para afianzar el sistema. En el caso que el pavimento ya esté colocado, las ranuras deben realizarse con una rozadora.
Antideslizante STAR, el sistema químico
El antideslizante STAR es un producto químico que reduce el riesgo de accidentes en los suelos resbaladizos. Es una solución rápida, eficaz y muy sencilla. El tratamiento reacciona con los minerales del pavimento y transforma las superficies resbaladizas, como por ejemplo los suelos mojados de granito o cerámica esmaltada, en zonas antideslizantes sin cambiar su aspecto. Es ideal tanto para suelos como para escaleras, bañeras o platos de ducha.
Artículos Relacionados:
– Texturas en la piedra para paredes, entre las nuevas tendencias decorativas